“Prometo, sin importar los retos que puedan separarnos, que siempre encontraremos el camino para volver a estar juntos.”
Todos los días de mi vida.
Y no cumplieron su promesa.
Hoy,
Hoy más que nunca se recuerdan. Les pilló de sorpresa no estar juntos después de tantos “para siempre” a los que el tiempo no hizo justicia,después de los besos que el tribunal NOSOTROS decidimos acusar como SEPARADOS.
Y sí,una vez más hablo de tu y yo y los “ojalá” que suspiramos contra la nada,porque nada nos volverá a unir. Solo el silencio.
Aunque si nos cruzáramos por casualidad porque quiero fingir que no te busco,uno de los dos tendrá que mentir,decir que está bien,de que volví a sonreír después de él.
¿Y como no?,sería yo.
Nuestros besos rimaban demasiado,quizás por eso no me los quito de la cabeza.
Sigamos haciendo poesía cariño.
Bueno el caso es que soy un caso aparte en tu vida,el caos que te desordenaba mañana tras mañana.
Ahora solo doy calada tras calada por todas las decepciones,soy aquella que escucha canciones para evadirse,a la que ya no le sonríen.
No se como te estarás sintiendo tú en estos momentos pero deberías ver lo que es no tener listo el desayuno de caricias a tiempo.
Ahora solo me faltan las ganas de comerme el mundo,solía hacerlo a tu lado.
«Así son las cosas: la rutina tarda un poco en darse cuenta de que ya no compartes tu tiempo.»
Y tu por si decides hacerlo,llegas a deshora para recoger los trastos que dejaste,yo entre ellos,algunos recuerdos.
Fin. No comimos perdices,solo heridas de placer.
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