jueves, 14 de julio de 2016

Entre tú y yo.


Cuando le rompes el corazón al amor de tu vida, cuando estás corriendo en la dirección contraria, cuando sabes que llorar no va a arreglar nada.
Vamos a ser sinceros por una vez; dijiste, a poner las cartas sobre la mesa, a confesar todo lo que no nos dijimos. 
Rompí la promesa, lo se, te aseguré el cielo y en estos momentos se lo intento dar a otro. Espero que lo entiendas, nunca quise hacerte daño, solo quería a alguien que me enamorase todos los días, solo quería que fueses tú. 
Caímos en picado a nuestro propio pozo y aunque me duela decírtelo, aunque no quiera hacerlo, nos estamos hundiendo, ahogando todo lo que fuimos.
Y joder si fuimos...
Érase una vez la historia de mi vida. Lo más perfecto que he tenido y hoy te he vuelto a ver como quién mira por última vez el mejor sueño que ha tenido jamás.
Sé que quedas mejor en mi vida que en mis recuerdos pero te lo aseguro, no podría olvidarte ni aunque lo intente, ni aunque bese todos los labios del mundo, los tuyos siempre han tenido algo especial. 
Si hubieras sentido todo lo que sentí yo en su momento sabrías cómo estoy ahora. En la recta final, siempre he tenido este miedo, acabar con todo porque todo eres tú y se que te he destrozado y eso me rompe poco a poco.
Mi amor... Dudo que pueda volver a llamarte así por que ahora seguro buscarás refugio en otra almohada para olvidar aunque tú no quieras... No te culpo, me adjudico el error, soy yo quién te está dejando ir y seguiré siendo yo quién se arrepienta.
No soporto las despedidas y nosotros no hemos parado de hacerlo, a ti jamás podría decirte adiós aunque ya sea la hora.
Espero que no olvides que te quiero, siempre he sido, fui y seré más tuya que de nadie. 
Entre tú y yo, de ti aprendí que soy más feliz contigo.