sábado, 27 de diciembre de 2014

Sin cita previa.

Sin cita previa.
Porque tu no necesitas decirme con antelación cuando presentarte.
Solo llega,yo te espero aquí sentada o mirando tu sonrisa en un recuerdo,sea como sea te espero a ti que echaste a volar sin darme alas a mi también.

A veces me pregunto cual era tu intención.. si dejarme en tierra esperando tu vuelta,venir luego a buscarme o simplemente deshacer lo que juntos creamos.
Si vienes otra vez que sea con respuestas,porque la imagen que dejaste te aseguro que es pésima.

Esto me pesa,llevo cargando con el suplicio de tenerte en mi cama desde hace tanto...
Hace tanto que juramos no separar(nos) tu sístole de mi diástole. Son tan diferentes el uno del otro.

En cada uno hay una válvula de escape. Tu utilizaste la tuya,ahora me toca a mi para salir a buscarte ya que sigo esperando tu vuelta y me quedo poco a poco sin esperanza.

¿Te acuerdas de nuestra última noche? Bebimos un vino cava y intentamos huir por una cavidad muy estrecha.
Por una calle en la que los poetas se ahogan con su propia sangre,y poco a poco,el palpitar que hacía rebotar sus palabras se deshace en un cúmulo de interrogaciones y de estúpidos deseos de poder escribirte una oda más.

El arnés de seguridad me impide avanzar,me retiene para dejar de hacer el ridículo.
Y al fin y al cabo a él le debo mucho porque fue el único que se quedó cuando “fuiste a comprar cigarrillos”...
'cariño,si ajustase el tiempo a todo lo que yo te sigo queriendo,te juro que regresarías'


No hay comentarios:

Publicar un comentario